lunes, 14 de julio de 2014

MANUEL NUÑEZ BUTRON Y RUNA SONCCO

La Atención Primaria de Salud tiene hondas raíces culturales, que en el Perú se remontan a la época incaica. En tiempos más recientes el Dr. Manuel Núñez Butrón, insigne pionero con visión moderna, organizó en las décadas del treinta y del cuarenta un amplio programa sanitario de base comunitaria y enfoque preventivo, que logró claro éxito en el control de las enfermedades transmisibles, entre ellas el tifus exantemático. Núñez Butrón llamó "Rijcharis" (Despertadores) a los trabajadores comunitarios de salud, a los que organizó y capacitó y es en homenaje a él y a ellos que esta palabra quechua, que puede traducirse como "Vigía", vuelve al léxico diario de la Atención Primaria de Salud. 

Runa soncco palabra quechua que significa “corazón de indio” es el título de una revista publicada del año 1935 al 1948, cuyos artículos reflejan el deseo por integrar la cultura andina con la salud pública occidental, desde el mismo campo de acción. Esta publicación logró situarse como una herramienta fundamental en la difusión del mensaje sanitario y de educación del movimiento indigenista liderado por el médico Manuel Núñez Butrón. Constituye una de las primeras experiencias en atención preventivo-promocional en el Perú y el mundo, anticipándose a lo que cuatro décadas más tarde se denominaría “atención primaria de la salud”.

Es el mismo Núñez Butrón quien organiza en brigadas sanitarias, o richarys, a curanderos, herbolarios, exsoldados y demás pobladores de la zona, quienes viajaban de una comunidad a otra atravesando largas distancias a pie o en moto, para enseñar a los indígenas el cuidado de su propia salud y la práctica de la higiene. Para ello, enseñaban a fabricar jabones, desinfectar habitaciones, así como las causas de las enfermedades y las ventajas de la vacunación, utilizando canciones populares con letras que promovían la alfabetización y la higiene, o presentando espectáculos de teatro al aire libre en lenguaje nativo; además de realizar actividades asistenciales que podían ir desde una exodoncia, hasta la atención de un parto

Por aquellos años el tifus y la viruela eran enfermedades endémicas en Puno y en el resto de regiones de la sierra central y sur del Perú. Estos padecimientos eran aceptados por los indígenas como algo cotidiano e inevitable, tal como lo refleja, un artículo en Runa Soncco en el que se menciona que: La viruela y el tifus son dos enfermedades que cuando visitan una casa se les recibe afablemente y cuando se van, se les despide con los honores que merecen. La revista, criticaba abiertamente los comportamientos y malos hábitos que favorecían la diseminación del tifus, como no cortar el pelo a los niños, colocar a los niños en la cama del enfermo de viruela, o la desconfianza de la población indígena hacia la vacunación. En Runa Soncco también se describió sesiones de debate entre los rijcharys y los campesinos sobre el origen mágico o científico de la viruela. Durante la primera mitad de 1937, los rijcharys realizaron mil vacunaciones y cortaron el pelo a poco más de seiscientas personas.

Uno de los aspectos más importantes del rijcharismo, y de Manuel Nuñez Butron, es el carácter inclusivo, que se propuso para difundir los contenidos de Runa Soncco. Considerando que muchos indígenas eran analfabetos, la revista era leída en voz alta por los mismos richarys, quienes se encargaron además de difundir otras publicaciones como diarios o folletos que remitía la dirección de salubridad, en una especie de biblioteca ambulante que recibía suscripciones gratuitas o por canje de otras publicaciones.

Dra Verónica Espinoza Medrano
Residente Medicina Familiar y Comunitaria

No hay comentarios:

Publicar un comentario